El deseo de poder analizar el tiempo libre infantil y juvenil en nuestra sociedad nos ha de poder llevar a hablar y enmarcar, en primer lugar, el análisis respecto a los cambios y transformaciones a todos los niveles que se han producido en los últimos años en la concepción y organización del tiempo en el conjunto de la sociedad.
En nuestra sociedad no existe la posibilidad de ser reduccionistas en los esquemas de tiempo y espacio en las vidas de las personas.
La concepción del tiempo en la vida de la persona está condicionada por muchos y diversos factores: desde los cambios tecnológicos, desde la misma concepción del tiempo de trabajo, del tiempo escolar, de los espacios de vida ciudadana, desde la concepción del consumo, desde la concepción diferenciada de los espacios, desde la misma concepción del tiempo libre y del tiempo desocupado...
Existe un cambio profundo y a la vez una crisis de enorme importancia en el valor del tiempo de las personas y para las personas. Posiblemente no hemos asumido ni valorado todavía de forma suficiente estos cambios y lo que esto ha de significar.
El tiempo en una sociedad con grandes procesos de cambio y transformación
En pocos años hemos asistido a unos cambios importantes en los tiempos de las personas. Entre otras cuestiones, podemos señalar, por su significado: por un lado, la incorporación de la mujer al mercado laboral, lo que ha provocado el cambio en el tiempo y en la organización de las funciones de la familia tradicional en el seno de la sociedad y de las mismas familias. Por otro lado, la disminución progresiva y real del tiempo de trabajo. Se trabaja globalmente menos horas y se puede disfrutar de más horas libres.